El sepelio de Eduardo Cabrera la tarde de este lunes constituyó una sentida manifestación de duelo. Eduardo falleció el domingo en la Capital, a los 54 años de edad, tras padecer quebrantos de salud durante varios meses. El nutrido cortejo fúnebre partió de la funeraria municipal de San Antonio de Guerra hasta llegar al templo parroquial de San Antonio de Padua, donde se ofreció un servicio presidido por el diacono Heriberto Consoró. Los dolientes se dirigieron luego al antiguo cementerio municipal donde los los restos de Eduardo recibieron cristiana sepultura. Eduardo estaba emparentado con antiguas familias del municipio; era hijo de Irene Cabrera (fallecida hace algunos años). Le sobreviven sus hijos Junior, Emmy y Niurka; sus hermanos José, Miledys, Sara, Josefita, Rafael (Tintío) e Israel (Bobote); primos, sobrinos y otros familiares.