Los tres días finales de las fiestas patronales de San Antonio de Padua transcurrieron con normalidad.
Luego de la controversia desatada por la ausencia de patrocinio para las actividades sociales, aunque los eventos religiosos no fueron afectados, las patronales se enrumbaron de acuerdo a la tradición con tarima en el parque y todo.
La población, especialmente la juventud, disfrutó como está acostumbrada, lo cual se refleja en numerosos mensajes de satisfacción colocados en las redes sociales.