Un camión repleto de armas y granadas de mano subió a la acera durante dos kilómetros (1.2 millas) y embistió a una multitud que estaba reunida para ver el espectáculo de fuegos artificiales del Día de la Bastilla en la turística ciudad de Niza, en lo que autoridades y testigos describen como un ataque deliberado. El fiscal de Niza, Jean-Michel Pretre dijo que los cuerpos quedaron tirados a lo largo del camino. Señaló que el incidente “cuenta con varios ingredientes de un ataque que nos permiten pensar que fue eso”. El político de mayor rango del departamento de Alpes Marítimos, el cual comprende a Niza, dijo que el camión embistió a la multitud durante una distancia de dos kilómetros (1.2 millas) y dejó 80 muertos y 18 heridos.
Muchas de las personas que quedaron sobre el suelo vestían pantaloncillos y ropa de verano. Eric Ciotti dijo a la televisora BFM TV que la policía mató al conductor “luego de aparentemente intercambiar disparos”. Sylvie Toffin, funcionaria de prensa de la prefectura local, dijo que el camión “impactó a varias personas durante un largo trayecto” por la acera cerca del Palacio del Mediterráneo de Niza, un edificio que da a la playa. Dijo que el incidente fue “un ataque”. Wassim Bouhlel, un residente de Niza, dijo que el camión embistió directamente a la multitud. “Hubo una masacre en las calles”, detalló Bouhlel. “Había cuerpos por todos lados”.