Washington.EFE
El papa Francisco abogó hoy en el Congreso de Estados Unidos por la «abolición mundial de la pena de muerte» porque «una pena justa y necesaria nunca debe excluir la dimensión de la esperanza y el objetivo de la rehabilitación».
«Estoy convencido que este es el mejor camino, porque cada vida es sagrada, cada persona humana está dotada de una dignidad inalienable y la sociedad solo puede beneficiarse en la rehabilitación de aquellos que han cometido algún delito», añadió.